Como llevamos avisando desde la semana pasada la Comunidad de Madrid estaba preparando una ristra de actividades con motivo del día del libro. Así que, en La Estación Central no hemos querido perder la oportunidad de dar un paseo por algunas de ellas.
Lo cierto es que más que la noche de los libros ha sido la tarde-noche porque hemos empezado la andadura a eso de las seis de la tarde y hemos echado el cierre pasadas las diez. El punto de partida ha sido el Kilómetro Cero, el lugar perfecto para empezar algo. La calle Preciados aparecía vestida por estanterías a derecha e izquierda. El Corte Inglés ha sido la «dominatrix» de esta zona. Aunque el Fnac también ha sacado sus armas literarias no ha conseguido hacerle sombra a la empresa líder, de la que ningún medio puede hablar mal por motivos publicitarios, ya sabéis, ‘la pela es la pela’. Y, llegando a la Plaza de Callao, más mesas destinadas a la venta, bastante transitadas dicho sea de paso. La Gran Vía no ha querido ser menos y se ha subido al carro de los puestos, con vendedores más tímidos, sobre todo en abundancia, pero con mejores ofertas. Los chinos, que no se pierden una, también han tomado las calles, ¿con cervezas? No, por Dios, con libros, como marca la tradición.
El paseo nos ha llevado hasta la mítica Plaza 2 de Mayo, donde los libros no se han vendido, sino que se han regalado, para que luego digan que hoy en día no se da gratis ni la hora. Pero claro, ¿si no se hace el día del libro, cuándo se realiza este despliegue? Pues, por lo visto, en la Librería Libros Libres todo el año. Se trata de una iniciativa que comenzó allá por el 2012 con la intención de fomentar la lectura. Sólo tienes que ir, dejarte conquistar por un libro y llevar uno que ya hayas leído. En realidad no es obligatorio dejar otro a cambio, pero nunca está de más.
Con el libro debajo del brazo hemos puesto rumbo al Café Comercial, donde ha empezado, a eso de las 19:00, una, vamos a llamarla, mesa de poesía. Los invitados, algunos amantes de este género y otros poetas de profesión, pero sobre todo de vocación, se han dado cita en este mítico local de la Glorieta de Bilbao con un objetivo común, el de homenajear a poetas que no han obtenido el reconocimiento que merecen. Durante un hora nos han envuelto con la lírica de Olvídame, o El relojero perverso, de José Elgarresta, En el desierto, de Stephen Crane y Las cosas que me acechan, de Victor Botas, «una de las mejores voces líricas que he escuchado y, sin embargo, un desconocido depende en qué círculo», esta ha sido la presentación que, del autor, ha hecho el responsable de la lectura. Uno de los Premios Pulitzer, Mark Stand, que empieza ahora a «pegar fuerte» en España, según nos explicaba otro de los ponentes, o los poemas de uno de los invitados, Alfonso Berrocal, Premio Gerardo Diego, esta vez en boca de un admirador, que le ha querido homenajear en el Comercial, han sido otros de los poetas que hemos disfrutado.
Bajando por la calle Fuencarral, hasta la de Montera, hacemos la última parada en el Costello Café & Night Club, donde se ha creado una estrecha amistad, de más de una hora, entre la música y la narrativa, de la mano de la banda Añadidos. Un espectáculo agradable para terminar esta jornada. Antonio de Egipto, a través de su poemario La Maleta, nos ha hecho viajar sin movernos de los escalones de la planta de abajo del bar. A estas alturas son pocos los que resisten a la noche del martes, sólo quedan algunos valientes que se dejan conquistar, junto a nosotras, por este peculiar cuento con ritmos de Pop Rock.
Ojalá hubiese más días como el del libro, más noches como la de los museos y más iniciativas, como La noche en Blanco, donde la gente sale a la calle, se deja contagiar por la cultura y Madrid se llena de personas con ganas de pasarlo bien, de disfrutar y de conversar, independientemente de que no conozcas a tu contertulio. Se regalan libros, flores y buenos gestos a cambio de nada y yo me pregunto, ¿es necesario tener una excusa para que este «buenrollismo» callejero se produzca?.
La Estación Central 
2 respuestas a “Por la noche de los libros”